"Cuando alguien se quedó en tu pasado es porque no encajaba en tu
futuro."
Bajo esas sabias palabras se pueden justificar pérdidas que creías injustas.
Y puede que sean unas palabras sabias y llenas de verdad. Pero yo me pregunto...
¿Qué hay de todas esas despedidas mal planteadas? ¿Qué hay de esos “para
siempre” que resultaron ser un “para nunca”?
Todos esos deseos, todas esas promesas... ¿acaso no eran más que mentiras?
¿O es que fue todo culpa mía? ¿Fui yo la que hizo algo mal?
¿Soy yo la culpable? ¿La que falló, la que mintió…? ¿O solo fui la que
perdió…?
Tras tantos años..., tras tantas palabras, no puedo evitar preguntarme…
¿acaso fallé en algo, hice algo mal…?
Me pregunto todo esto pues, aun bajo esas sabias palabras, creo que no hay
nada de verdadero en perder aquellas personas que tantas promesas y deseos
dijeron en tu favor.
viernes, 30 de noviembre de 2012
lunes, 19 de noviembre de 2012
Olvidé...
Olvidé lo que era sonreir.
Tantas y tantas lágrimas caídas que recorrieron hiriendo cada milímetro de
mi rostro dejando unas cicatrices invisibles que jamás seré capaz de curar del
todo.
Esas lágrimas que como afiladas cuchillas borraron poco a poco cada rastro
de mi pequeña y mentirosa sonrisa.
He olvidado lo que era sonreir.
He olvidado aquello por lo que merecía la pena sonreir.
viernes, 28 de septiembre de 2012
Sometimes.
Algunas veces me siento vacía.
Me siento tan vacía que creo que podría desaparecer.
Este sentimiento de ahogo que asola mi garganta a veces es
tan profundo que de verdad me cuesta respirar.
No sé qué hacer. No hago más que dar vueltas.
Sin conocer su origen, ni adivinar su solución. Solo ahogándome
cada vez mas y mas, hasta que se me olvida como respirar.
viernes, 6 de julio de 2012
Y aun así lo intento...
Hay tantas cosas que no puedo escribir aquí.
Hay tantas
cosas que no puedo decir... Tantas y tantas cosas que simplemente no tienen el
valor de pronunciarse, de salir de mi mente y dar paso a mi voz.
Esa pequeña y
tímida voz que no siempre se atreve a romper el silencio que la rodea.
Esa débil voz
que se siente tan insignificante y cohibida.
martes, 12 de junio de 2012
Recuerdos.
Siéntate. Y párate a pensar en todo lo que has perdido. En todo lo
que dejaste atrás, olvidado. Acurrucado en un rincón como un pequeño cachorro
que aguarda por una caricia... por una mirada. Porque alguien se acuerde de él.
De que esta ahí, de que sigue ahí. Esperando fielmente por aquel que quiera
recogerlo... y recordarlo.
Hay tantas cosas.
Tantas que merece la pena pararse a pensarlas, a recordarlas. Que nos emocionan
y nos erizan la piel como si estuviésemos volviendo a vivir esos momentos...
como si sucediesen ahora mismo. Y los recordamos tal cual eran; hasta el más ínfimo
detalle, por insignificante que pueda parecernos.
Lo recordamos.
Porque muchas
veces, esos detalles insignificantes son los recuerdos más importantes que
grabamos a fuego en nuestra memoria, como si fuésemos a perder nuestra esencia
si los olvidamos.
Como si fuésemos a
perdernos a nosotros mismos.
miércoles, 6 de junio de 2012
Soledad.
Echo de menos la soledad.
Echo de menos la libertad de estar sola.
Echo de menos el no preocuparme por quien podría abrir la puerta, pues la
soledad no molesta ni interrumpe.
Echo de menos hacer lo que quiera y cuando quiera.
Echo de menos la libertad de llorar hasta hartarme en mi delicada
soledad.
Y aun así... odio estar siempre
sola.
sola.
miércoles, 2 de mayo de 2012
Nadie.
Dicen que la cara es el espejo del alma, que viendo a través de los ojos de
una persona puedes descubrir cómo es esa persona en realidad.
Pero entonces... ¿qué pasa cuando esa cara esta bañada en lágrimas y no se
puede ver bien?
¿Qué pasa con mis ojos empañados de tanto llorar?
¿Nadie podrá ver nunca como soy en realidad?
¿Nadie podrá verme y deshacer así el nudo que ahoga mi garganta y me impide
respirar?
¿Nadie...?
martes, 24 de abril de 2012
Gracias.
Quiero volver... volver a ese lugar de mis
recuerdos que compartimos tú y yo. Aquellos días en los que compartíamos
aquellas sonrisas que solo nosotros conocíamos. Aquellos momentos que vivimos
inocentemente, sin mirar ni preocuparnos por el futuro, por un futuro que tanto
dolor nos tenía preparado.
Un futuro que jamás deseé vivir, jamás lejos
de ti... Pero aun así te fuiste, desapareciste de mi vida, de mis brazos... de mi
futuro... Te fuiste y yo no pude hacer nada por evitarlo, no me dejaste..., no
me diste tiempo.
¿Cómo te atreviste a irte? ¿Cómo decidiste
que ya era hora de poner lágrimas en mis ojos? En estos ojos que tanto te
amaban, te adoraban... y que aunque pasen mil años lo seguirán haciendo.
Aquellos ojos que jamás olvidarán lo que les hiciste ver, aquellos que jamás
olvidarán...
Pero mi peor temor al final acabó llegando, y
aun cuando lo intento y lo sigo intentando olvidé algo que tanto me
fascinaba... olvidé el sonido de tu voz, y no imaginas cuanto me odio por eso.
Pero hay mil cosas más que jamás me permitiré olvidar... Jamás... Pues por
muchos más años que pasen tú por siempre vivirás en mi corazón y mi recuerdo.
Porque nadie jamás logrará sacarte de ahí...
Por eso estas palabras son para ti.
Pues aun miro al cielo y veo tu cara entre
sus nubes cada vez que suena aquella canción...
Gracias.
martes, 10 de abril de 2012
Dreams.
Sueños… ¿Qué son los sueños? Siempre me lo he preguntado… Tienen mil interpretaciones, para cada persona serán una cosa diferente: metas, logros, deseos, temores, fantasías… Pero yo sé lo que significan para mí. Los sueños… Mis sueños es donde soy feliz. Son aquel lugar en el que no tengo ningún temor, el único sitio en el que nunca me siento sola ni aun estando en la más remota soledad. Son donde me siento querida, amada, cuidada, donde siento que nadie me defraudará, me engañará, me herirá… donde nadie generará mi tristeza, ni permitirá que mis ojos derramen lágrimas de pena o dolor. Allá donde nadie me traicionará. Donde simplemente exista la felicidad, la amistad, el amor, la lealtad. Donde me siento especial. Mis sueños son ese mágico lugar donde se cumplen mis deseos.
Es el lugar donde estás tú…
Donde puedo alcanzarte, donde puedo sentirte… allí donde tu eres real para mi. Donde no necesito fingir mi sonrisa ni esconder mis lágrimas; donde no necesito fingir ser feliz, pues simplemente lo soy.
Allí donde olvido mi pesar y mi sufrir. Allí donde no necesito pensar, donde olvido todo para empezar de nuevo…
Por eso cuando me preguntan porque me gusta tanto dormir, yo respondo:
“Porque durmiendo, mejor dicho; soñando, es el único momento en mi vida donde soy capaz de olvidar lo que me hace llorar día a día. Es donde puedo vivir mi vida como desearía que fuese.
Por eso odio tanto despertar… ”
jueves, 29 de marzo de 2012
Cold.
Se apagan las luces.
Se cierran las puertas.
Y ese pequeño rayo de esperanza y felicidad desaparece en la húmeda oscuridad.
Se siente frío... Frío que paraliza mi sangre y congela mi espíritu.
Y esas gotas de lluvia que recorren mi cuerpo dejando cicatrices allá por donde pasan. Lluvia... lluvia que poco a poco se convierte en lágrimas saladas que empañan mi mirada y nublan mi juicio, sin darme si quiera tiempo para preparar mi defensa. No. Acuden, acuden sin más aún cuando no se las llame. Veloces y certeras llegan a su destino, sin detenerse en su camino. Surgen de mis ojos, derramándose por mis mejillas y muriendo en mis labios. Y así cumplen su cometido, desencajando mi mirada y congelando mi cara con ese frio que tanto daño me hace...
Que tanto odio...
Suscribirse a:
Entradas (Atom)